Como ya habíamos anunciado la semana pasada, debido al COVID, estamos sufriendo una situación catastrófica en el transporte de viajeros. Gracias al informe de Estadística de Transporte de Viajeros publicado por el Instituto Nacional de Estadística (INE), podemos observar que el número de usuarios de transporte público se ha visto reducido a casi la mitad de 432,26 millones en junio de 2019 a 156,5 millones en junio de 2020(276 millones menos, un total de 63.5 % de descenso). De estos usuarios, 359.000 viajeros usaron el avión (un 91 % menos que en junio 2019), descendiendo el uso del autobús en un 63,4% y en un 67,4% el uso del transporte marítimo. A pesar de haber habido una oferta suficiente en el transporte urbano, la demanda ha sido muy baja respecto al año pasado, en concreto 106.5 millones de viajeros menos: un 58.4 %, siendo la ciudad más afectada por este descenso ha sido la de Barcelona con un 62,5 %. No obstante, se ha producido un incremento en el número de viajeros, tras el pos confinamiento durante los meses de abril, mayo y junio La gran incógnita y mayor preocupación viene dada por el transporte discrecional con una caída de un 95% respecto a junio de 2019.